jueves, 7 de febrero de 2008

DINAPEN


La Dirección Nacional de la Policía Especializada en Niños, Niñas y Adolescentes

A través de programas y proyectos de capacitación la Dinapen por mas de 10 años ha contribuido al desarrollo integral y social de los niños, niños y adolescentes en todo el país, para cumplir dicho propósito la Dinapen se basa en tres ejes fundamentales, con el fin de evitar los secuestros y maltratos.

1. Prevención: a través del Patrullajes las 24 horas, en escuelas y colegios donde hay presencia de pandillas, drogas y prostitución. Además ofrecen Charlas permanentes a profesores, estudiantes y a la comunidad en general sobre el maltrato y los derechos de los niños, niñas y adolescentes.

2. Capacitación: dirigida a los miembros de la Policía Nacional de otros servicios para crear conciencia y sensibilizarlos sobre la problemática que enfrentan los niños, niñas y adolescentes.

3. Intervención: Investigación técnica-científica en casos de infracciones o delitos cometidos contra niños, niñas y adolescentes en coordinación con la Fiscalía, Procuraduría de Adolescentes Infractores, Comisarías de la Mujer, Defensoría del Pueblo.

En la actualidad la Dinapen esta inmersa en una serie de actividades vinculadas al ámbito educativo, las misma que buscan erradicar el maltrato dentro del hogar y la escuela, ya que según datos proporcionados por el Observatorio de la Niñez, 4 de cada 10 niños y niñas de 6 a 11 años ha recibido golpes de sus profesores, 4 de cada 10 desconocen que hay leyes que protegen sus derechos, 2 niños de cada 10 no viven con sus padres y uno de cada 10 no están matriculados en la escuela. Los adolescentes entre 12 y 18 años en cambio, presentan el siguiente cuadro: 3 de cada 10 no están matriculados en la secundaria, 2 de cada 10 trabajan y no estudian, 3 de cada 10 han iniciado su vida sexual, 4 de cada 10 fuman, 3 de cada 10 consumen bebidas alcohólicas.

viernes, 1 de febrero de 2008

Instituciones al servicio de los niños


Algunas instituciones a través de campañas de concientizacion buscan en cierta parte erradicar el alto índice de menores en las calles. El INFA es una de las pocas instituciones sin fines de lucro que buscan el desarrollo social de los niños, desde sus inicios se ha visto reflejada su labor en los sectores de poco interés social, es por eso que hoy en día el Innfa constituye el núcleo fundamental para la lucha contra la violación de los derechos de los niños.
El INNFA desde 1990, ha trabajando con niños y niñas trabajadores. En principio, luchó por mejores condiciones de trabajo y mayor escolarización. En 1997 adoptó firmamente la política de UNICEF y el OIT: la abolición total del trabajo infantil. Ahora, tiene programas integrales para desincentivizar el trabajo infantil, y para ayudar a los chicos a dejar su trabajo.
El gran reto del Innfa para el futuro, es tener una respuesta adecuada a los nuevos problemas sociales, económicos y culturales que van apareciendo a lo largo del camino; y para ello tiene el respaldo político, social que son básicos para desarrollar su labor a nivel nacional.

realidad social

Niños de la calle

Niños de la calle es una forma de denominar a los menores de edad que carecen de residencia estable y en la mayoría de los casos de un núcleo familiar y hace de la calle su hogar convirtiéndose en marginados sociales. En grandes ciudades a diario se los observa vendiendo caramelos, limpiando carros, buscando entre la basura lago de comida, pues son pocas las instituciones y organismos que se encargan de cubrir sus necesidades.

Los niños de la calle se enfrentan a la siguiente problemática:
Son niños desprotegidos, por lo que deben luchar para defenderse, para lo cual conforman comunidades entre si con el fin de protegerse mutuamente.
Deben buscar su subsistencia de cualquier manera, por ende en la mayoría de casos tienden a delinquir.
Prostitución infantil: los menores se hacen víctima de la prostitución infantil, especialmente las niñas.
Tráfico infantil: víctimas de las redes de tráfico infantil.
Drogadicción: se hacen consumidores fijos de drogas.
Abuso infantil: víctimas del abuso infantil.
Explotación infantil: víctimas de la explotación infantil.
Violencia urbana: puede hacer parte de pandillas delincuenciales juveniles que azotan las ciudades.

Actualmente se puede decir que existen alrededor de 18 millones de "niños y niñas de la calle" en la India, unos 40 millones en América Latina y alrededor de 100 millones en todo el mundo. Pero, no es una realidad exclusiva del Tercer Mundo y su número crece sin freno. La mayoría son adictos a las drogas, desde la heroína al pegamento común, habitualmente bases solventes dedicadas al calzado que pueden encontrar a bajo precio.

viernes, 7 de diciembre de 2007

the kill




30 seconds

Derecho de los ni�os




Campa�a en Mexico

miércoles, 5 de diciembre de 2007

LAS CALLES Y SUS REGLAS

LA CALLE

La calle, al igual que la escuela, es el primer lugar en el que el niño se aparta de lo materno y lo familiar para encontrarse con realidades sociales preexistentes, a veces muy distintas de las de su ámbito doméstico, a veces, muy violentas y rudas. Es, de otra parte, la calle el sitio donde se produce el primer encuentro con el mundo de lo público; un mundo de individualidades, donde el niño tiene, por lo tanto, que enfrentarse a las diferencias, las debe aceptar aunque sea a regañadientes y conoce de la existencia de 'los otros', que con frecuencia se le imponen con gran rudeza y falta de consideración. Es allí donde 'el grupo social' de los amigos e iguales pero también el de los rivales y el de los mayores ejerce toda su influencia y va moldeando las individualidades infantiles que recién han sido expulsadas por el hogar.
Si bien la calle, como tal, no pueda ser definida y entendida como una organización formal, abstracta, generalizada y regida por normas precisas, no quiere decirse con ello que en la misma impere la anarquía, el desorden social, la falta de organización. De hecho, existen y rigen allí normas y procedimientos que deben ser acatados por quienes acceden a ella. Por lo tanto, en la calle el niño tiene un primer encuentro con la ley, como un principio de orden social y organización social, como un primer elemento de cohesión y de referencia para su comportamiento social muy diferente de lo experimentado hasta ahora en su mundo doméstico. Es posible que las normas de la calle no tengan la rigidez y formalidad que exhiben las que rigen en la escuela pero pueden ser tan o más eficaces que las actuantes en esta última.


La calle significa también un encuentro con relaciones de poder, diferentes a las familiares y a las personificadas por los maestros y maestras si es que el niño asiste simultáneamente a la escuela. Deberá, por lo tanto, aprender a reconocer jerarquías, y saber que las decisiones que pueda tomar estarán en más de una ocasión condicionadas por consideraciones ajenas a su voluntad y que no siempre serán de su agrado.

De esta manera, para lograr el reconocimiento de las diferentes realidades que le ofrece la calle, el niño deberá realizar un autoconocimiento del 'yo', establecer las fronteras del mundo doméstico privado, delimitar su propia individualidad para reconocer a 'los otros', las otras individualidades, con las que tendrá que interactuar sometiéndose a veces, dominándolas en otras oportunidades. Es posible que desarrolle especiales habilidades para competir pero también puede llegar a ser un excelente cooperador.

Aunque con todos los riesgos que la caracterizan, la calle puede presentarse como alternativa frente a una grave situación de violencia familiar y social, provocada por un sistema socio-económico discriminatorio y excluyente. La calle se presenta como un espectro amplio de estímulos para el niño: ofrece respuestas para satisfacer sus necesidades básicas; es un lugar donde se encuentra con grupos secundarios de referencia, de identificación; es un espacio donde adquiere destrezas y aprende a compartir y a ser solidario; la calle es, también una aventura y una oportunidad para experimentar la autonomía deseada.

La calle es el espacio de referencia especialmente para los niños abandonados, maltratados y para aquellos que cometen infracciones y tienen conflictos con la ley. Ciertos "sectores" determinados por los mismos niños se convierten en su "habitat" para realizar sus actividades informales, para sobrevivir a través de limosnas o robos o para buscar un horizonte recreativo. Los mercados, los terminales de buses, los centros comerciales, los parques y las venidas comerciales son los lugares en los que están presenten niños de la calle y niños trabajadores. Para tantos niños la calle es la única escuela para su vida.

LA REALIDAD DE LAS CALLES


En la actualidad el problema de los niños de la calle es una realidad latente para todos, pues en cada esquina de la ciudad están deambulando sin rumbo, pidiendo a gritos que los ayuden. Algunos grupos e instituciones sin fines de lucro tratan en cierta parte de acudir a su llamado, pero no pueden hacer mucho por ellos, porque no cuentan con los recursos necesarios para cubrir todas sus necesidades y también porque algunos de los niños están acostumbrados a esa vida de vagancia y vicios.

En la calle los niños corren muchos riegos como: los vicios, la droga, los abusos por parte de personas mayores, las violaciones, etc., además se debe tener en cuenta que están propensos a la presencia de serios problemas de salud, especialmente afecciones del sistema respiratorio que se presentan a través de tos crónica y bronco espasmo, están expuestos también a epidemias de tuberculosis, producto del hacinamiento y el alto grado de desnutrición que presentan.

Pero el mayor riego constituye la drogadicción: la mayoría de niños recurren a este vicio porque quieren olvidar la realidad por la que están atravesando, algunos para olvidar el maltrato que recibían en sus casas, otros para calmar el hambre y la rabia hacia la sociedad que los margina día a día.


Sabías que...
Según UNICEF, 20 millones de niños y niñas en América Latina consumen más de 70 millones de litros al mes de “goma de zapatero”, una especie de pegamento que muchos utilizan para apagar el hambre y evadirse de la realidad. Esto significa un gran negocio para las empresas fabricantes. En Estados Unidos las sustancias basadas en tolueno están controladas estrictamente, mientras que son precisamente dos empresas estadounidenses las que producen la cola vendida en Latinoamérica.
Recientemente anunciaron que iban a suprimir este componente en sus productos, aunque lo sustituirán por ciclohexane, sustancia seis veces menos tóxica que sin embargo causa efectos parecidos tanto en el momento de su inhalación como a largo plazo sobre la salud, según Casa Alianza.